Más que una imagen ( Semana 6)
- isil isileño
- 30 abr 2018
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 11 jun 2018
Muchas veces juzgamos y señalamos a los demás por pensar que son diferentes a nosotros o tal vez porque a simple vista parecen ser de una manera que no nos agrada. Nos dejamos llevar mucho por lo que se dice “Primera impresión” pero con esa primera impresión no puedes saber cómo es alguien en realidad, cuáles son sus gustos, que valores tiene ni cómo piensa.
Por ejemplo cuando yo estaba en quinto de primaria, era de los que molestaba mucho a los demás por cómo se veía o simplemente me dedicaba a criticar y juzgar a aquellos compañeros con los cuales ni había cruzado palabra anteriormente. Un dia mi tutora de clase me llamó a la oficina y me preguntó por qué lo hacía, qué es lo que ganaba haciendo eso y no supe qué responder.
La profesora me habló de un compañero, Gabriel, era al que más molestaba porque yo pensaba a simple vista que era una persona aburrida y se me hizo fácil agarrarlo de punto por así decirlo. La profesora cuando me habló de Gabriel, me comentó que él y yo teníamos mucho en común, nos gustaba la misma música, practicábamos los mismos deportes, así que un dia decidí hablarle, luego de horas hablando nos dimos cuenta que teníamos demasiadas cosas en común incluso vivíamos relativamente cerca.
Luego de la plática con la profesora cambié mi manera de pensar y pues no me dejaba guiar por las primeras impresiones, lo que me pasó con Gabriel fue una mala percepción sobre cómo era, puedo decir que con los años he cambiado y ya no juzgo ni doy opiniones sin conocer a alguien.
Ahora tengo 20 años y Gabriel y yo somos muy buenos amigos, hemos aprendido muchas cosas con el paso de los años.
Y tú … ¿Te dejas guiar por las primeras impresiones?

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